Walter Kasper en la plaza de San Pedro

El purpurado alemán considera que “deben participar plenamente en la vida de la Iglesia”El cardenal Kasper augura que los divorciados vueltos a casar “tendrán pronto acceso a los sacramentos”

Admite que “representantes de alto rango de la Iglesia han estado manchados” por la pederastia. No podemos pensar únicamente en un mundo en que existan millones de personas que padecen hambre, son expulsados o explotados, mientras otros naden en la abundancia aprovechándose de esta injusticia

Jesús Bastante/Agencias.- Los católicos divorciados y vueltos a casar “tendrán pronto acceso nuevamente a los sacramentos”, según la predicción llevada a cabo por el cardenal alemán Walter Kasper, miembro de la Congregación para la Doctrina de la Fe, al semanario alemán Die Zeit.

En la entrevista, Kasper subrayó la “necesidad” de “una reforma en campos que requieren, desde la Iglesia, cambios y aperturas”, tal y como han subrayado los miembros del “G-8” cardenalicio y el propio Francisco. Unos cambios que también habrán de afectar a los fieles que han contraído un segundo matrimonio y que, en su opinión, “deben participar plenamente en la vida de la Iglesia”. Para Kasper, “el perdón, que es posible para Dios, también puede aplicarse a la Iglesia”.

En otro orden de cosas, el purpurado aseguró compartir “plenamente” la iniciativa del Papa, también propuesta por la comisión de cardenales, por implicarse plenamente en la atención a las víctimas de abusos sexuales por parte de sacerdotes. “El abuso no es sólo un pecado, es también un crimen”, incidió, resaltando que “incluso representantes de alto rango de la Iglesia han estado manchados” por esta lacra.

Sobre las críticas papales al sistema económico mundial, Kasper también coincide en resaltar que “todo el mundo debe tener lo suficiente para vivir. No podemos pensar únicamente en un mundo en que existan millones de personas que padecen hambre, son expulsados o explotados, mientras otros naden en la abundancia aprovechándose de esta injusticia”.

Jesús Bastante