Nuestro amigo Luis me ha invitado a que participe en esta “Página”. Antes de contestarle, he pensado si yo podía aportar algo.

Desde hace tiempo vengo dando vueltas al tema de traducciones deficientes de muchos pasajes evangélicos que se siguen manteniendo por inercia, por pereza o por desconocimiento.

Lo que me preocupa es que esas traducciones deficientes condicionan muchas de nuestras formas de entender el mensaje de Jesús. Y esto sí me parece importante. De modo que se me ha ocurrido ir aclarando esas frases tan repetidas y más de una vez sesgadas o incompletas. Por ejemplo:

“venga a nosotros tu reino”

“dad al César lo que es del César”

“bienaventurados los pobres en espíritu…”

“mi reino no es de este mundo”, etc.

Añado que, desde hace más de tres años, estoy colaborando en el Diccionario Griego Español del Nuevo Testamento (DGENT), el primero que se hace en nuestra lengua. Se realiza en la Universidad de Córdoba y se va publicando por fascículos. Juan Mateos inició el equipo Grupo de Análisis Semántico de Córdoba (GASCO). Tras su muerte, asumió la dirección Jesús Peláez, catedrático de griego en la Facultad y miembro del equipo desde el primer momento.

La técnica específica que se utiliza en este DGENT es el método de análisis semántico que desentraña el significado de cada palabra o lexema. Quiero dejar claro que yo no soy especialista, pero este equipo necesita mucha labor de peonaje y ahí participo yo con ilusión. Aprendo muchísimo. Lo que intento hacer con mi colaboración en esta “página” es compartir con vosotras y vosotros esos pequeños “descubrimientos” o “hallazgos” que voy encontrando y que me abren tantas perspectivas.

Por fortuna, existen cada día más traducciones de toda la Biblia o sólo del Nuevo Testamento. Todas ellas se realizan ya desde la lengua original hebrea o griega. Unas traducciones son más literales y otras más literarias. Unas están pensadas para ser leídas en público y otras miran hacia una lectura individual que puede ser más exigente y hasta más dura en su redacción. En general van mejorando porque incorporan aciertos y hallazgos de otras traducciones tanto al español como a otras lenguas.

La traducción básica que utilizamos y transcribimos en el DGENT es la del Nuevo Testamento que forma parte de la “Nueva Biblia Española” y que fue traducido por Juan Mateos. Ediciones El Almendro publicó la tercera edición en 2001.

Para personas poco o nada conocedoras de la lengua griega resulta a veces desconcertante encontrarse traducciones bastante diferentes entre sí. Al no disponer de instrumentos para el análisis, no saben a qué atenerse. Lo que intento hacer en sucesivas entregas es explicar traducciones que ya figuran en el Nuevo Testamento de Juan Mateos, pero que chocan con traducciones aceptadas por inercia y de forma rutinaria. Creo que nos pueden ayudar a comprender mejor y más en profundidad el mensaje de Jesús.

¿Os vale esta introducción? Pues empiezo. Desde luego, si no quedáis satisfechas o satisfechos, no os puedo devolver el dinero… Pero cierro el pico y se ha terminado. Hasta la próxima semana.

Pope Godoy.– Andújar (Jaén)

Deseamos que desde la próxima semana, si es posible, cuente nuestro amigo Pope con un apartado para sanear nuestra lectura del Nuevo Testamento.

Pope Godoy fue un gran colaborador de Juan Mateos. Aprovecharemos su cercanía para difundir los libros y sabiduría de Mateos.