Salmo XCIX

R/. Somos su pueblo y ovejas de su rebaño

Aclama al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría,
entrad en su presencia con vítores. R/.

Sabed que el Señor es Dios:
que él nos hizo, y somos suyos,
su pueblo y ovejas de su rebaño. R/.

«El Señor es bueno,
su misericordia es eterna,
su fidelidad por todas las edades.» R/.

Somos su pueblo y ovejas de su rebaño

Aquí está el núcleo de nuestra fe

Aquí reside la raíz de nuestra esperanza.

Sabed que el Señor es Dios: que él nos hizo, y somos suyos. su pueblo y ovejas de su rebaño

En tiempos del salmista, el rebaño era la riqueza del Pastor. El pastor cuida de su rebaño como lo más querido de su propiedad. Al más débil lo lleva en sus brazos.

¿Cuándo cambiaremos o modificaremos la fotografía que alguien nos inculcó de Dios?

Segunda lectura

Lectura del libro del Apocalipsis(7,9.14b-17:

Yo, Juan, vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, raza, pueblo y lengua, de pie delante del trono y del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos.
Y uno de los ancianos me dijo: «Éstos son los que vienen de la gran tribulación: han lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero. Por eso están ante el trono de Dios, dándole culto día y noche en su templo. El que se sienta en el trono acampará entre ellos. Ya no pasarán hambre ni sed, no les hará daño el sol ni el bochorno. Porque el Cordero que está delante del trono será su pastor, y los conducirá hacia fuentes de aguas vivas. Y Dios enjugara las lágrimas de sus ojos.

Palabra de Dios

Luis Alemán Mur