6 DICIEMBRE 1.962

La intervención, en francés, de Máximos IV, [nacido en la hoy triste Alepo de Siria] patriarca melquita de Antioquía, destacó como de costumbre. Después de haber señalado que el esquema sobre la Iglesia era “en el aspecto doctrinal, la clave del concilio”,
y de haber evocado “la infalibilidad de la Iglesia universal“, el orador ha deplorado eljuridicismo sofocante”
del texto y elolvido significativode los obispos titulares en la sección relativa al episcopado.

Con respecto a la primacía de Pedro, existe, según él, algo así como “una insistencia morbosa en recordar esta verdad y en aislarla, como si no hubiese nada más que el papá”. Estigmatizando “ciertas exageraciones adulatorias e Interesadas”, Máximo IV ha declarado: “Nos revuelve el estómago leer intemperancias de lenguaje que lindan con la impiedad, tales como ésta (sacada de una obra italiana):El papa es Dios sobre la tierra; Jesús le ha situado por encima de los profetas, por encima de san Juan el precursor, por encima de los ángeles, al mismo nivel que Dios”.

Diario del Concilio. Henri Fesquet