juan vicente boo / corresponsal en el vaticano (ABC)

Advierte de que «no podemos disponer de ella a nuestro antojo y sin límites»


afp
Con extraordinaria fuerza, el Papa Francisco advirtió a cien mil asistentes a la audiencia general que «si destruimos la Creación, la Creación nos destruirá a nosotros. ¡Nunca lo olvidéis». En su catequesis a peregrinos de todo el mundo subrayó que «la naturaleza no es una propiedad de la que podamos abusar a nuestro antojo, ni mucho menos es la propiedad de unos pocos, sino un don de todos, que debemos custodiar».

El Santo Padre advirtió que todos los abusos terminan pasando factura, muchas veces a personas inocentes que no han causado el daño ecológico pero terminan siendo sus víctimas. Y recordó que «según el dicho popular: Dios perdona siempre, los hombres algunas veces, la naturaleza nunca».

Hablando al margen del texto escrito, el Papa realizó una apasionada defensa de la naturaleza y de la persona humana como «uno de los dones del Espíritu Santo, el don de ciencia, que nos hace descubrir cómo la belleza y la inmensidad del cosmos nos habla del Creador».

En un plano esencialmente religioso, el Santo Padre afirmó que el don de ciencia nos ayuda «a conocer mejor la realidad y descubrir las leyes que regulan la naturaleza y el universo. Pero no se limita a la ciencia humana, sino que nos lleva a comprender, a través de la creación, la grandeza del amor de Dios y su relación profunda con cada criatura».

El Papa recordó las palabras del Génesis, según el cual, al final de cada jornada de la creación, «Dios vio que era una cosa buena», mientras que después de crear el hombre y la mujer vio que era «cosa muy buena». En esa línea subrayó que «debemos reconocer en el hombre y la mujer la cumbre de la creación, como un proyecto de amor impreso en cada uno de nosotros que nos hace reconocernos como hermanos y hermanas».

El Santo Padre, que está preparando una encíclica sobre la protección de la naturaleza y la «ecología humana», invitó a seguir «la huella de san Francisco de Asís y de tantos otros santos que han sabido alabar y cantar el amor de Dios a través de la contemplación de la naturaleza creada».

El trabajo en el documento requerirá todavía varios meses, pero la catequesis del Papa sobre el respeto a cada persona y a la naturaleza, a partir de motivos estrictamente religiosos, es muy frecuente desde el principio.

Su primera referencia fue en la misa de inauguración del pontificado, el 19 de marzo del 2013. Subrayó la importancia de custodiar la naturaleza «y también custodiar a la gente, preocuparse por todos, especialmente por los niños, los ancianos, los más frágiles».