(EXISTEN VERSIONES DESCARGABLES EN https://www.luis-aleman.info/historico-evangelio/)

18 MAYO 5º DOMINGO DE PASCUA

Jn 14,1-12


Jesús a sus discípulos: «Que no tiemble vuestro corazón; creed en Dios y creed también en mí.

Volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo, estéis también vosotros. Y adonde yo voy, ya sabéis el camino

Tomás le dice: «Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?»

Jesús le responde: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí. Si me conocéis a mí, conoceréis también a mi Padre. Ahora ya lo conocéis y lo habéis visto.»

Felipe le dice: «Señor, muéstranos al Padre y nos basta.»

Jesús le replica: «Hace tanto que estoy con vosotros, ¿y no me conoces? Quien me ha visto a mí ha visto al Padre.

¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Lo que yo os digo no lo hablo por cuenta propia.

Creedme: yo estoy en el Padre, y el Padre en mí.

Porque yo me voy al Padre.»

“Porque yo me voy al Padre”. Todo el evangelio de Juan es un escrito de madurez. Se escribía al final del primer siglo. Narra la actividad de Jesús con pleno conocimiento de quién era Jesús. Ahora cierra aquel Verbum caro factum est con la despedida de los suyos. Se va con el Padre.

“Que no tiemble vuestro corazón; creed en Dios y creed también en mí”. La fe de los seguidores de Jesús (“los discípulos”) era una fe muy inmadura. El adiós de Jesús produjo pánico en el pequeño grupo. Se quedaban solos. La soledad puede ser un primer paso para la amargura y el abandono. Para esa enfermedad, aquí solo se cuenta con la fe en Dios y en Jesús. Dos mil años han pasado y nunca faltó esa fe. ¿No sería esto un milagro continuado?

“Volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo, estéis también vosotros”. No es posible tener fe en Jesús sin creer que volverá. Llevamos tiempo esperando la vuelta. ¿Pero qué es tiempo, cuando hablamos del tiempo de Dios? El evangelista pone en boca de Jesús una promesa: Volverá y nos llevará con él. Pero ya dijo él que el día y la hora era cuestión del Padre. “Y adonde yo voy, ya sabéis el camino”. Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?  

CREDO CRISTIANO:

Quien me ha visto a mí ha visto al Padre.

-Creedme: yo estoy en el Padre, y el Padre en mí.

-Nadie va al Padre, sino por mí. Si me conocéis a mí, conoceréis también a mi Padre.

-El que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aún mayores.

-Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. –  

Luis Alemán Mur