Salmo LIII

R/. El Señor sostiene mi vida

Oh Dios, sálvame por tu nombre,

Sal por mí con tu poder. 
Oh Dios, escucha mi súplica, 
atiende a mis palabras.

Porque unos insolentes se alzan contra mí, 
y hombres violentos me persiguen a muerte, 
sin tener presente a Dios.

Pero Dios es mi auxilio, 
el Señor sostiene mi vida. 
Te ofreceré un sacrificio voluntario, 
dando gracias a tu nombre, que es bueno.

“El Señor sostiene mi vida”

¡Menos mal! Pero también Dios ha puesto a mi alrededor quien me sostiene en mi extrema debilidad.

¡Gracias Señor! ¡Que no me falte tu ayuda ni mi fe en mi última debilidad!

Luis Alemán Mur