Tomemos distancia de nuestras preocupaciones inútiles:

1. Hay problemas que no necesitan solución, necesitan tiempo. Queremos tenerlo todo bajo control y solucionarlo ya, hay problemas que se van solucionando con el tiempo.

2. Aprende que tus pensamientos no siempre son verdades. Tendemos a hacer juicios de valor sobre nosotros, solo advierten de tus miedos, no tienes porqué tomarlos en cuenta.

3. Luchar contra tus pensamientos no hará que desaparezcan porque son como las arenas movedizas, mientras más te agitas más presencia tienen.

4. Aprende a clasificar tus preocupaciones en útiles o inútiles. Útiles son las que puede resolver en este momento, de esas te tienes que ocupar aunque te duelan, e inútiles son las que la solución no depende de ti.

5. Aceptar es la clave para manejar muchos pensamientos que no puedes controlar, porque hay cosas en la vida que no tienen explicación.

6. Deja de darles protagonismo no merecido, lo haces cuando las rumias, juzgas o buscas interpretaciones pero que no suceden así.

7. Aprende a tomar distancia de tus pensamientos, no hará que desaparezca pero no te dolerá como cuando las rumias.

Oído e TV 2

Tomemos distancia de la fecha del hoy y miremos con ojos largos.

El clero no es la Iglesia. La Iglesia de Jesús no es el Vaticano. La Iglesia de Jesús no es santa ni nunca fue santa. En la iglesia abundaron y abunda multitud de pueblo santo. El Espíritu que nos dejó Jesús permanece, y es quien mantiene a los santos. Pero los pecadores con fe seguimos luchando por seguir los pasos de Jesús: también somos iglesia de Jesús.

Miremos con ojos largos. Sin perder la fe.

La fe es la fuente de nuestra esperanza.

Fe cansada. Pero fe.