(Reeditado en respuesta a las peticiones de nuestros lectores)

Tomás de Torquemada, O.P., (1420 Ávila, 16 de septiembre de 1498) fue un dominico castellano, confesor de la reina Isabel la Católica. Primer inquisidor general de Castilla y Aragón en el siglo XV.

Torquemada inició el mayor periodo de persecución a “judeoconversos

Este piadoso religioso sembró de torturas y sangre la incipiente nación. Siendo cruelísimas las torturas y muertes, quizá, lo peor fue el ADN que sembró en los españoles. El pueblo quedó marcado con los chivatos, la traición al vecino, familiar o amigo. Todo en nombre de Dios y de la pureza teológica y costumbrista.

A Torquemada le debemos la santa inquisición: A él y al papa Sixto IV. Al final, los inquisidores terminarían por corrompidos hasta los tuétanos.

En tiempos de Jesús el galileo, los fariseos actuaban como inquisidores en defensa de la Ley: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, ¿qué dices?

El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella

Hoy, la corrupción política ha dado pie a una nueva inquisición. Y una plaga de Torquemadas recorre los pueblos y las instituciones. ¿Están todos libres de pecados?

Luis Alemán Mur