Pan y Peces inaugura su nueva sede en Madrid

Amplio sótano en la Calle Medellín

“Nos llena de emoción comprobar cómo ha crecido la obra”, asegura su directora

La fundación tiene como objetivo proporcionar un carrito mensual a cada familia con todo lo necesario para el día a día (Javier Repullés, fundador de Pan y Peces)

La fundación Pan y Peces, creada para proporcionar alimentos a las familias en crisis, ha ampliado sus instalaciones con la inauguración de un nuevo local en Madrid.

Esta organización cristiana sin ánimo de lucro fundada para dar a las personas más necesitadas alimentos básicos y productos de limpieza e higiene personal, tiene como objetivo proporcionar un carrito mensual a cada familia con todo lo necesario para el día a día. Cada uno de estos carritos está diseñado para atender las necesidades de los hogares según el número de componentes, sus edades y su estado de salud. Apoyan también la educación de los niños, y su lema es la discreción para que los hijos no conozcan la procedencia de los alimentos.

“Los locales anteriores, con almacén y oficinas separados, se nos habían quedado pequeños”, dijo durante el acto inaugural la directora de la fundación, Roció Redondo Delgado. “Nos llena de emoción comprobar cómo ha crecido la obra”.

Bendijo las instalaciones, situadas en un amplio sótano de la calle Medellín 12, su fundador, Javier Repullés Benito, un jesuita muy rompedor, que trabajó con el famoso padre Llanos en los tiempos heroicos del Pozo del Tío Raimundo y ha participado en varios movimientos solidarios, como la famosa huelga de hambre del 07.

“Inaugurar viene de dar buenos augurios”, dijo, “y esto es lo que hacemos: querer a los demás es bendecir nunca maldecir, decir mal de nadie”. Citando el libro de la Sabiduría, dijo que “el mundo entero es ante ti como un grano de arena en la balanza, como gota de rocío mañanero que cae sobre la tierra”. Y que el sentido de Pan y Peces es amar a todos los seres sin distinción, pues “¿cómo subsistirían las cosas si tú no lo hubieses querido?” (Sab 11,23-12,2).

Pan y Peces, la que más alimentos reparte de Madrid, surgió de un pequeño servicio en Pan Bendito y muestra cómo las ONG se han visto obligadas a actuar como organizaciones subsidiarias ante la inoperancia del Estado en situaciones de crisis para las familias afectadas por el paro y la nueva pobreza, que no pueden llegar a fin de mes.

Pedro Miguel Lamet